Sobre la propuesta de Directiva del Parlamento Europeo y del Consejo relativa a la calidad de las aguas destinadas al consumo humano  

El peticionario denuncia los altos niveles de contaminación de los compuestos de perfluoroalquilo (PFAS) en las capas freáticas (acuíferos) de las que actualmente se extrae agua destinada al consumo humano en los territorios de las provincias de Vicenza, Verona y Padua, en la región del Véneto.Recuerda que el Gobierno italiano, con una resolución del Consejo de Ministros de 21 de marzo de 2018, declaró el «estado de emergencia» en relación con los niveles de contaminación en estas provincias.Recuerda además que en 2017 la región del Véneto estableció límites estrictos sobre las sustancias de perfluoroalquilo y ordenó el inicio de una experimentación destinada a lograr la «ausencia virtual» de sustancias de perfluoroalquilo en la cadena de suministro de agua potable.A la luz de las consideraciones anteriores, y en el contexto de la revisión actual de la Directiva 98/83/CE que establece las características de calidad para las aguas destinadas al consumo humano y la preparación de alimentos, el peticionario solicita, entre otras cosas, las siguientes acciones:- programar una audiencia ante el Comité de un Representante de los Alcaldes que será nombrado de común acuerdo entre los alcaldes de los territorios afectados por la contaminación del PFAS;- pedir que la nueva directiva establezca el mismo límite impuesto por la región del Véneto con las resoluciones n.

1590 y n.º 1590 y n.º 1591, de 3 de octubre de 2017, y que este límite se aplique en toda la Unión Europea o, al menos, que los Estados miembros conservan la facultad de establecer excepciones a las disposiciones de la Directiva en un sentido más restrictivo, con especial referencia a los límites establecidos para las sustancias de perfluoroalquilo;- solicitar la intervención del Parlamento Europeo en apoyo de una «Recomendación» al Gobierno italiano para que apoyare todas las iniciativas necesarias a fin de hacer frente a este grave fenómeno de contaminación del PFAS, incluida una prohibición de asentamiento de nuevas industrias en las zonas de carga de aguas subterráneas, así como una prohibición a las industrias existentes de derramar sustancias contaminantes.