En nombre del Comité de Ciudadanos de Piazza d'Armi, acompañada de 86 firmas, para prohibir la construcción dentro de un espacio verde urbano 

El peticionario aspira a conservar 35 hectáreas de espacios verdes en la zona de Piazza d'Armi, que forma un oasis natural en la ciudad de Milán. En 2016, la propiedad de esta área pasó del Ministerio de Defensa al Ministerio de Economía y Finanzas. Este último, a través de una empresa de gestión inmobiliaria, lo ha puesto a la venta, mencionando en la convocatoria de licitación que el comprador puede tener la oportunidad de construir alrededor de cuatro mil viviendas, en una zona residencial designada, así como edificios terciarios y comerciales según la normativa de planificación urbana de la ciudad. Este proyecto de transformación también contempla la demolición de edificios militares de valor histórico y arquitectónico. El comité subraya las cualidades intrínsecas de este espacio verde, que constituye un ecosistema único (que contiene bosques de hoja ancha, humedales y huertos) que es crucial para el nivel del agua subterránea en la ciudad. También proporciona estimaciones preocupantes (extraídas del informe ISPRA 2016 sobre «Agotamiento del suelo, dinámica de la tierra y servicios ecosistémicos») sobre la pérdida de servicios ecosistémicos debido a la sobreconstrucción. Además, el comité llama la atención sobre el impacto que la construcción tendría en la flora y la fauna del humedal, especialmente en aves migratorias y anfibios, que incluyen 39 especies de avifauna protegidas por la Directiva 2009/147/CE (la Directiva de aves) y con arreglo a la Directiva 92/43/CEE (Directiva sobre hábitats). También destaca el efecto provisional que Piazza d'Armi tiene sobre la contaminación atmosférica en Milán y sus alrededores, gracias a su área boscosa que mide el equivalente a 50 campos de fútbol (a este respecto, el área metropolitana de Milán incumple continuamente los valores límite diarios y anuales de la UE para la concentración de ambas partículas (PM10) y dióxido de nitrógeno (NO2)). Finalmente, los peticionarios citan el valor histórico y antropológico de Piazza d'Armi, particularmente la actividad agrícola y las limitaciones del paisaje relacionadas, así como las campañas de mantenimiento de la concienciación locales dirigidas por el Fondo Ambiente Italiano en 2017. Todos estos puntos apoyan el argumento de la creación de un gran parque público donde todo el espacio verde y la zona boscosa de Piazza d'Armi se pueda conservar como una «capital natural de la biodiversidad».